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A la idea del camping deporte en sí mismo, la
definición que lo considera adyuvante de otro deporte agrega la de su alianza
tan natural con las otras actividades de la vida al aire libre. Hoy día, no se
hacen solamente marchas, sino travesías por etapas con campings intermedios;
muchos piragüistas se han convertido en piragüistas acampadores, y el
ciclo-camping ha encontrado numerosos adeptos entre los cicloturistas. También
el ski se presta a un audaz camping sobre la nieve, a condición de estar
provisto de una buena tienda isotérmica. Es por esto que alguien ha calificado
de «supersport» al camping porque debe ser considerado como deporte en el más
amplio sentido de la palabra. En este sentido, deporte no significa otra cosa
que un ejercicio físico practicado como juego de diversión. No debemos
confundir este concepto con el de competición deportiva que sin embargo se
tiende hoy en día a incluir en la significación de la palabra deporte.
Para nosotros, existe un hecho mucho más
característico de la naturaleza del camping, y es que los diferentes deportes
de los cuales él es el adyuvante tienen todos un mismo objectivo: la práctica
del turismo. El camping es pues el deporte turístico por excelencia, y
podríamos definirlo así: medio de turismo
deportivo que permite un contacto más estrecho con la naturaleza mediante la
utilización de la tienda como abrigo. [JORSIN, 1966: 12-13]
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REFERÊNCIA BIBLIOGRÁFICA
JORSIN. Camping. Barcelona: Editorial
Sintes, 1966, pp. 280.
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